Los más eminentes científicos pocosíacos se han centrado en el desarrollo de un sistema protector ante posibles explosiones nucleares intraterráqueas, porque estamos viendo que la cosa se está desmadrando mucho.
Tras largos meses de esforzado trabajo conjunto se ha conseguido por fín: el Chuletón Sintético Protector
Consiste en un inmenso chuletón, de casi medio año luz de gordo, que orbita calculadamente a la exacta distancia del sistema solar para que haga efecto y una velocidad calculada también para que el sistema funcione. ¿Cuál es la distancia y la velocidad?
Fervosio Panancha, descendiente de 34ava generación y compañero del gran e imprescindible Varadio Pixonio, pasaba el rato experimetando con las emisiones poliradiónicas inflacionistas y sin darse cuenta se chamuscó un poco con radiación gamma verde326. La mano se le quedó fatal, se quemó mogollón. Hambriento como estaba decidió comerse un buen chuletón, mientras recibía la curación automatizada de los Robots Curran. Ante su sorpresa, y al enseñarle la Bangourmet el chuletón antes de ser coccionado para apreciarlo, como a él le gusta, observó que sus heridas desaparecieron. De inmediato incluyó los chuletones en las experimentaciones y finalmente concretó que los chuletones anulan la fusión y fisión nucleares, las energías atómicas destructivas que manejan los Concaps en nuestra cautiva tierra. Tras inacabables cálculos y basándose en los análisis de las redes reguladoras traductivas de señal y las de cascada de regulación transcripcional aplicadas a la distancia, se estableció que un chuletón sintético de medio año luz de espesor y unos 8 de largo por 5 de ancho, y orbitando a una distancia de 89 años luz del sistema solar, anula efectivamente toda posibilidad de explosión nuclear primitiva en la tierra. Ese pedazo Fervosio, que agudo es.
En otro órden de cosas, y sin dejar de hablar de chuletones, diré que los chuletones pocosíacos son sintéticos, pero no advertiríais la diferencia de tener ocasión. Se emulan exáctamente todas las características, equivaliéndose con los antiguos chuletones verdaderos, de animal, cosa que no se practica en la civilización pocosíaca desde hace milenios. Los animales y plantas, y todo lo viviente en general, son seres hermanos. Las implantaciones y potenciaciones axoneurales en los seres hermanos permitieron que disfrutáramos de la inteligencia y la fluida comunicación con mamíferos, peces, flores, árboles, bacterias… en fin todos nuestros seres hermanitos
Las civilizaciones postpotenciación están integrados en la misma civilización pocosíaca, como iguales. Ya hablaremos de los Pancongresos Panespecie Pocosíacos, o PANPANCOS, y de los Pancongresos Civiliciónicos Intergalácticos, o PANCINTERS. Curiosos y sabios compañeros de existencia os aguardan en próximas narraciones
Los concaps hostigan, maltratan y matan a la humanidad terráquea, ante nuestras miradas acomodadas en la bonanza de la civilización pocosíaca, sin que podamos intervenir más que en contadas y muy seleccionadas ocasiones, que si no…
Yo Potasio, humano terráqueo natural, descubridor de la fusión fría pilé y acogido por los tortorianos y pocosíacos extraterráqueos, afirmo que lo dicho es cierto
Que todos estemos bien
PS: Nótese que me he despedido con algo diferente ésta vez, no he utilizado el repetido e incumplidísimo “Hasta pronto” de siempre. Vamos progresando, de eso no hay duda, aunque no sé si al edén o a la mierda… pero progresando
19 Octubre 2006
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