miércoles, 3 de noviembre de 2010

Nikof huye sin parar, Tortor le putea incansablemente

Pasaremos a narrar cómo los Tortorianos planearon la estrategia para apresar a Nikof después de que éste y los malvados Nicotinos desbarataran la inauguración del edén posible. Es que dan unas ganas de cogerlo y castigarle despiadadamente haciéndole escuchar todas las galas y ediciones de OT seguidas.
Tortor tiene sintonizado en todo momento a Nikof. Sabe siempre donde está, qué piensa y qué trama y no para de molestarle. Tortor se preocupa de turbar todo momento de intimidad y tranquilidad de nuestro malvadísimo Nikof. Que se las hace pasar canutas vamos. Sólo falta atraparlo.

Se estudiaron minuciosamente las características de la extraordinarísima, rara, rara, muy rara de verdad propiedad de Nikof: el teletransporte instantáneo, sin gasto energético ni emisión de residuos, a velocidades tan altas que la física conocida hasta el momento tuvo que reorientarse para poder asimilar la evidencia. Nikof se desplazaba a velocidades tan superiores que el término velocidad dejó de tener sentido en él pues su velocidad era infinita o absoluta.
Nadie podía explicar el proceso por el momento, sólo aceptar que era posible.

Las tecnologías desarrolladas por los Tortorianos/Pocosíacos permitían velocidades muy superiores a la de la luz, posibilitando los desplazamientos intergalácticos. Pero lo de Nikof escapaba a toda explicación científica incluso para la avanzadísima ciencia Pocosíaca.
Se teorizó en varias direcciones. Con el desarrollo experimental se asentaron las hipótesis más correspondientes con la evidencia. Fueron decisivas las filmaciones multiespectrales que se consiguieron de Nikof en reposo y en los momentos de inicio y final del teletransporte. No se apreciaba descomposición ni reestructuración molecular en dichos momentos.

La hipótesis de la transposición intrafascicular de Varadio Pixonio, eminente Pocosíaco, explicaba el fenómeno.
De alguna manera Nikof se manifestaba de manera inusual en nuestro espacio dimensional, disponiendo de una propiedad singular: la dimensión espacial completa en nuestro conjunto dimensional apreciable. Su posición es completa, absoluta, pero su masa es concreta, finita. Su velocidad de desplazamiento también es absoluta, infinita. Está en todos sitios, en todo momento, a velocidad absoluta, infinita, pero infinita de verdad.
Su capacidad para conservar su posición estática, consiste en un voluntario bucle redireccionalizador que incurre continuadamente en un mismo espacio concreto. Gracias a esa peculiaridad Nikof puede, desgraciadamente, interaccionar con el medio, estar propiamente dicho.
Esto no es un anuncio de refresco famoso. Es una ocultada realidad

Comprendiendo ligeramente su capacidad, se decidió desarrollar una “trampa Nikof” que consistiría básicamente en la elaboración de un material que impidiera la transposición intrafascicular a su través, de manera que una masa concreta, en éste caso Nikof, no pudiera atravesarla. La obtención de éste material fue desde entonces el objetivo principal de todos los Tortorianos. Desde el desbaratamiento del edén posible por los Nicotinos hasta la publicación actual, han pasado 4000 años en los que los Tortorianos han conseguido desarrollar el material para la trampa Nikof. Construir un sistema capaz de atrapar definitivamente a Nikof comienza a ser posible. Pero eso lo contaremos más adelante.

Volvamos ahora a los tiempos que siguieron al desbaratamiento del edén posible. ¿Qué hicieron Nikof y los Nicotinos?

Nikof asimiló su posición: todo lo que pensara, cualquier lugar en el que pudiera estar, sería y es conocido por Tortor. Se centró en asegurar su vida. Encontró después de muchos esfuerzos un planeta habitable fuera del alcance de las poderosas naves de los Tortorianos, cerca del borde del universo conocido. Las naves Tortorianas tardarían en llegar algunos años.
El planeta Colnubia fue su primera morada. Planeta rico en vida vegetal y por tanto en alimentos, sin depredadores, respirable y en definitiva compatible con la vida humana. Una vez se tranquilizó y consiguió descansar (lo que le deja Tortor claro), localizó cientos de planetas alejados de los Tortorianos en los que ocasionalmente pudiera refugiarse. Cada planeta nuevo que descubría/e Nikof era/es inmediatamente conocido por Tortor y los Tortorianos, que enviaban/an al instante algún transporte pocosíaco u nave a dicho planeta, repleto de robots control que son capaces de detener a Nikof en reposo, si se descuida el muy cabrón.
De ésta manera, la mayor ocupación de Nikof consiste, casi exclusivamente, en la localización de planetas de dichas características, alargando algún tiempo más su seguridad. Los Tortorianos estrechan el cerco más y más, localizando también dichos planetas y ocupándolos con robots control y otros androides pocosíacos.
Convivir con la permanente conexión mental con Tortor es su pesadilla, su interminable tortura y afortunadamente para la humanidad, lo que le dificulta el desarrollo de su malvada actividad. Vivir sin la compañía de sus compinches, sin herramientas ni otros útiles, escondido en por poco tiempo ocultos planetas salvajes, completa su fatalidad.
Nikof se puede desplazar a voluntad pero no puede llevarse nada consigo. Tiene que construir todo con las materias primas que encuentra en los planetas. Se tiene que contentar con una pequeña cabaña y con primitivos y rudimentarios utensilios. Es que se lo tiene ganado por malvado.
Nikof dio instrucciones a sus secuaces para que disolvieran la Nicotina agrupación, pues Tortor sabía ya quienes eran los Nicotinos. La mayoría de éstos crueles esbirros del mal fueron atrapados en pocos años, exceptuando un nutrido grupo, denominado NK4, que dotado de la sustraída tecnología Tortoriana, consigue escapar hasta nuestros días, pero que poco más pueden hacer que eso: huir.
Nikof se reúne con ellos e intentan remediar su situación desventajosa, pero les resulta enormemente difícil pues Tortor conoce detenidamente cada cosa que planean. Cada encuentro de Nikof con los del NK4 constituye un gran riesgo de ser apresados pero hasta ahora han conseguido escapar.


20 Noviembre 2005

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